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martes, 16 de junio de 2009

Nomenclatura demoníaca - Letra B

Baal, también conocido como Beel y Bel: divinidad (probablemente el sol) de varios pueblos situados en Asia Menor y su influencia: fenicios, caldeos, babilonios, sidonios e israelitas. Tiene el poder de hacer invisible a quienes lo convocan y puede volver a un hombre en un sabio.

Baalcefón, también conocido como Baalzephon, Balcefón y Baal-Sefón: divinidad de origen egipcio. Capitán de las guardias y centinelas del infierno; a posteriori se encargó de la fidelidad de los esclavos.

Baco, también conocido como Iacco: su nombre procede del término indoeuropeo que originó al sánscrito baksha (‘devorar’); del griego bakchos, por ser el símbolo del fuego que devora los sacrificios. Es el dios grecorromano de la vid y el vino, identificado con Dionysos, y que presidía sobre todos los árboles frutales. En Demonología figura como príncipe de los sátiros y los silenos; es alegre y gozador y cuando asume el aspecto humano, uno de sus pies presenta algún defecto, y su pene es sobredimensionado. Suele presidir el Sabbath.

Bacon: se le conoce como el demonio de los celos; de mal natural y carácter resentido, es el que siembra la discordia entre amantes.

Bahaman: demonio que apacigua la cólera.

Baltazo: demonio íncubo de gran seducción, sólo se sabe de él que posee a las mujeres para tener relaciones sexuales, pues no se le conoce otra ocupación.

Bafomet (también conocido como Baphomet, Bafometo y Baffometo): su nombre procede de la fusión de dos términos griegos cuyo significado aproximado es el de ‘bautismo de sabiduría’.

Barbatos: uno de los tres demonios ayudantes de Astaroth. Es el conde-duque del infierno.

Barbelo: demonia de gran poderío, aunque de características desconocidas.

Barbudo, también conocido como Barqu y Barbu: demonio poseedor del secreto de la piedra filosofal, que se aparece bajo la forma humana, con la cara cubierta por una blanca y descomunal barba.

Barkai: demonio de jerarquía menor; conoce los secretos de los astros: fue el maestro de los astrólogos.

Barón: su nombre deriva del celta baran o barwn, ‘Señor’). Es un demonio al que se le ofrendaban las manos y los corazones de los niños sacrificados. Gilles de Rais era un adepto al demonio, del que obtendría la receta para la Piedra Filosofal.

Barrabam, también conocido como Barrabás: demonio de categoría que era frecuente grabar su nombre en anillos mágicos y amuletos.

Batscumbasa, también conocido como Batscun Bassa y Batscum-Pacha: demonio turco que se invoca para atraer el buen tiempo o las lluvias; le gusta mucho el pan, que no consigue en el infierno, por lo que hay que ofrecerle buenas cantidades para atraerse su voluntad.

Bayemón: rey en Occidente, cuyo nombre aparece en ciertos grimorios; tiene poder sobre Passiel y Rosus.

Bebal, también conocido como Babeal y Babael: demonio que ostenta el grado de príncipe, y se desempeña como el guardián de las tumbas.

Bechard: señor de los vientos y las tempestades; produce la caída del granizo, la lluvia y difumina los truenos, por el poder de un maleficio que contiene sapos machacados entre otros elementos.

Bechet: demonio del viernes, cuya predilección son las nueces; es un espíritu nocturno.

Behemot: demonio de la mitología hebrea, enemigo de Leviatán que se enfrentaron al principio de los tiempos y han de ser destruidos por Dios antes de que acaben con su Creación. También se dice que batallarán el día del Juicio Final.

Bel: divinidad suprema de la teogonía caldeo-babilónica, transformado en un demonio cuya voz tiene un sonido retumbante muy particular.

Belcebú ‘señor de las moscas’ (Beelzebub, Ba'al Zebûb y Baal Zabut: en la mitología hebrea se empleó para designar a Satán o a algún demonio menor, de acuerdo a la costumbre de representar como malignas a las deidades ajenas (el dios creador Baal, en este caso).

Belial (Belhor, Baalial, Beliar, Beliall, Beliel): demonio que estaba constantemente al acecho para apoderarse de las almas de los que practicaban una sexualidad libre.

Belias: demonio de gran poderío, es el príncipe de las virtudes.

Belphegor: demonio que ayuda a la gente a hacer descubrimientos, principalmente en el campo de la ciencia. Es difícil de convocar debido a que su ofrenda de sacrificio es excremento.

Beng, también conocido como Bheng: su nombre deriva del término indoeuropeo que originó al sánscrito bheka, ‘rana’. Es el demonio de los gitanos, cuyos adeptos son adoradores de las serpientes, teniendo, en general, gran respeto por los reptiles.

Bentameleón: diablo posesivo, aunque dócil y educado, que llegó a pedir permiso y ofrecerse para entrar en un cuerpo.

Bohinum: su nombre deriva del hebreo bohu, ‘desolación’. En la mitología hebrea es el demonio del mal. También se conoce así a un ídolo armenio del metal negro, símbolo de la noche.

Braathwaate: demonio de la ignorancia.

Brifault, también conocido como Brifot, Briffaut y Biffant: demonio de gran poderío, que suele ser partícipe en actos de posesión; poco conocido, no obstante, jefe de legión.

Brulefer: demonio al que se invoca cuando se quiere inspirar amor, garantiza el hecho de cualquier aventura erótica.

Bucón: demonio del odio, de la peor especie, citado en las Clavículas de Salomón.

Budú, también conocido como Vudú, Vodú y Voodoo: dios africano de la hechicería; ídolo de la isla de Ceilán, representado bajo la forma de un gigante. Enseñó el arte de su mismo nombre a los grandes hechiceros de las tribus de Ceilán.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Nomenclatura demoníaca - Letra A

Aamón

Abaddón

Abalám (Abalán): príncipe del infierno, poco conocido y perteneciente a la corte y séquito del rey Paymón. Presenta la figura de una mujer coronada de una diadema centelleante de piedras preciosas. Comanda doscientas legiones de ángeles rebeldes y de fuerzas infernales.

Abdiel (del árabe abd- es un prefijo que se traduce como ‘esclavo’): demonio árabe; Señor de los esclavos y la esclavitud.

Abducius: demonio que desarraigaba árboles enormes y aplastaba a los hombres con ellos.

Abduxuel: uno de los demonios gobernantes de las mansiones lunares, de acuerdo a la tradición de Enoch.

Abrahel

Abraxas

Abyssus: su nombre significa ‘desesperado’.

Acatriel: uno de los tres príncipes de los buenos demonios (en la cábala hebrea, que admite demonios de dos clases).

Acham: demonio de orden inferior, que se conjura el día jueves y al que le gusta el pan.

Aclahayir: genio y espíritu de la cuarta hora del Nuctemeron.

Adonis (Adón, Dumuzi y Tammuz)

Adriel: uno de los demonios de las mansiones de la Luna, de acuerdo con la tradición enochiana.

Af: demonio menor en la mitología hebrea, con cabeza de carnero; es originario de Nubia y Abisinia.

Agagliareth, también conocido como Agaliarept y Agliaret: gran general del infierno, comandante de la segunda legión; posee el poder de descubrir todos los secretos, y domina en Europa y en Asia Menor. Manda sobre Buer, Gusoyn y Botis.

Agares: gran duque infiernal que puede hacer que los fugitivos regresen, causar terremotos y enseñar lenguas, encontrando placer en dar a conocer expresiones inmorales.

Agatión, también conocido como Agathión o Agazión: demonio familiar que sólo se presenta al mediodía; aparece en forma humana o de animal doméstico y, en ocasiones, se deja encerrar en un talismán, botella o círculo mágico para mejor servir a quienes lo invocan, pese a que su poder es muy limitado.

Agnan, también conocido como Agnián, Añá y Añán: espíritu malvado de los tupinambás, en Brasil; se le atribuía el poder de sacar a los muertos de la sepultura, si los parientes no dejaban ofrendas. Torturaba a los humanos y se le podía ver en cualquier lugar bajo diferentes formas.

Agramón: demonio del miedo.

Agrat-Bat-Mahlaht

Ahazu, el Aferrador: demonio babilónico que provocaba las enfermedades; espíritu de la noche.

Ahpuch, también conocido como Ah Puch, Yum-Cimil, Mitnal y Hunhau: demonio maya. Tenebroso dios de la muerte, representado en forma de cadáver parcialmente putrefacto, con el esqueleto y el cráneo visibles; en otras ocasiones, se lo ve en forma de hombre con cabeza de búho. Preside el Mitnal (noveno y más profundo de los mundos inferiores); los mayas creen que viajaba por las casas de las personas enfermas, buscando nuevas víctimas.

Akibel, también conocido como Akikel: uno de los 200 ángeles que, bajo el mando de Azazel, corrompió y enseñó a los humanos los signos de la Cábala.

Al Rinach, también conocido como Alrinach, Albinach y Aldinach: demonio de Occidente (Egipto) que preside las tormentas, los terremotos, las lluvias, las granizadas y los maremotos; a menudo hunde los navíos, y se deja ver en figura de mujer.

Alecto: una de las tres Furias (Euménides o Erinias) griegas del Tártaro.

Algol: demonio de los astrólogos árabes.

Allatou: demonio femenino, esposa de Nergal; tentaba a las personas a realizar actos inmorales.

Alpiel: demonio de poca categoría, de carácter indolente y bucólico; se especializa en proteger los árboles frutales.

Alricaus: demonio que se conjura el sábado; es el jefe de guerra que manda sobre 22 legiones de diablos. Enseña lógica y psicología a quienes le sirven.

Aluca, también conocida como Alouqua: demonio femenino; súcubo que actúa como un vampiro, agota a los hombres y les lleva al suicidio.

Alukah: ente infernal de la mitología hebrea, de origen babilónico. Chupa la sangre de las personas mientras duermen.

Amane: uno de los 200 ángeles que —bajo el mando de Samyaza— se rebelaron contra Dios al descender a la Tierra y unirse a los hombres y enseñarles las ciencias prohibidas.

Amazarac: uno de los 200 ángeles rebeldes que descendió del Cielo y enseño a los humanos todos los secretos de la hechicería y los encantamientos.

Amdusias: duque infernal de imagen humana o de unicornio que, al ser convocado, viene acompañado por un sonido de trompetas. Los árboles se inclinan según él desee.

Amoymón, también conocido como Amaimón y Amoimon: rey infernal (uno de los cuatro, en la parte oriental), y príncipe de la monarquía; se le evoca por la mañana, desde las 9 a las 12, y por la tarde de 15 a 18 horas; aparece rodeado de llamas, enseña astrología y artes liberales, descubre a sus amigos los tesoros guardados por los demonios. Comanda a los ángeles caídos y a las Potencias, y ordena 36 legiones; su lugarteniente es Asmoda (o Asmodeo), el primer príncipe de sus Estados.

Anamelech, también conocido como Anamalech: su nombre significa ‘buen rey’. Es un demonio oscuro, portador de malas noticias; cuando se hace visible, adopta la forma de una perdiz. Era adorado en Sefaraim (Asiria). Algunos estudiosos de demonología sostienen que este diablo es la Luna, como Adramelek es el Sol.

Anazareth, también conocido como Anazarel: demonio encargado de la custodia de los tesoros subterráneos; junto a Gaziel y Fecor, conmueve los cimientos de las casas, provoca las tempestades, toca las campanas a medianoche, hace aparecer espectros e inspira terrores nocturnos. Su estigma es que no puede conocer el amor.

Andromalius: conde infernal que puede devolver tanto al ladrón como los bienes robados, castigar a los ladrones y otras personas malvadas y descubrir tesoros ocultos.

Aneberg, también conocido como Anabergo y Anneberg: demonio alemán, con aspecto de macho cabrío con cuernos de oro, o bien como un gigantesco caballo con un gran cuello, que vive bajo tierra y carece de todo rasgo amable; es el terror de los mineros, ya que muchos de ellos mueren al contacto con su espantoso aliento.

Anubis: dios egipcio de la muerte y amo del infierno (V dinastía), hijo de Set y Nephtys, con cabeza de chacal o de gavilán. Patrón de los embalsamadores, conducía las almas para ser sentenciadas en juicio respecto de su futuro.

Any: demonio que preside el infierno.

Aqueronte: demonio-río griego de los infiernos. Nadie podía atravesar dos veces el Aqueronte.

Aquiel: demonio que se evoca los domingos a la medianoche en un lugar desierto, el rito del conjuro debe hacerse con luna nueva o con el cielo tapado con nubarrones, y el cual pide a cambio un pelo de la cabeza.

Arachula: espíritu maligno del aire.

Araco, también conocido como Arakho: demonio que arrebataba el vino de la inmortalidad y lucha contra el Sol y la Luna.

Ardad: demonio que conduce a los viajeros extraviados.

Ariel: en la mitología hebrea, espíritu demoníaco del aire (más específicamente de los vientos). En el del islamismo, arcángel de Dios, identificado como un hombre con cara de león.

Arioc: demonio de la venganza.

Arioch: uno de los ángeles caídos que fue castigado por seguir la rebelión de Satanás.

Ascaroth: demonio que protege a los espías y los delatores; depende de Nergal.

Ascicikpasa, también conocido como Asic-Pachá o Ascik-Pacha: demonio turco, relacionado con el amor y el erotismo. Favorece las intrigas secretas, facilita los partos y los medios para romper encantamientos.

Asima: dios macho cabrío de Siria, adorado también en Samaria. Demonio que ríe cuando hace el mal.

Asmodeo, también conocido como Asmodai, Sydonai, Chammadai, Asmodeus y Asmodaeus): demonio persa de la religión mazdiana (zoroastriana). En el Libro de Tobit, Asmodeo se enamora de Sara, hija de Raquel, y cada vez que aquélla contrae matrimonio, mata al marido la noche de bodas. Así llega a matar a siete hombres, impidiendo que consumen el matrimonio.

Asmoug, también conocido como Aschmog: demonio de Persia, que siembra las disensiones, querellas y pleitos, bajo las órdenes de Ahrimán; se representaba como una serpiente infernal con dos patas, que produce todos los animales venenosos.

Astaroth: duque infernal cuyos principales ayudantes son tres demonios llamados Aamon, Pruslas y Barbatos.

Astarté, también conocida como Baalit, Astartea, Estarot y Diana: reina de los espíritus de la muerte y esposa de Astaroth; preside los placeres del amor, su figura tiene cabeza de ternero con cuernos, y una cruz en la mano. Tuvo dos hijos: el Deseo y el Amor.

Até: divinidad maléfica griega, hija de Zeus y Eris (la discordia); personificaba la venganza, la injusticia, la perversidad, la fatalidad, el mal como condición humana o el arrebato y el extravío de la irreflexión. Habitaba en el Olimpo, pero fue expulsada por sembrar la discordia; sutil y voladora, no tocaba el suelo, vagando siempre a la altura de las cabezas de los hombres para inspirarles el mal, y su carácter abstracto y vengativo recuerda el de Erinys y Némesis.

Athatriel: ángel caído, condenado por no estar de acuerdo ni con Dios ni con Luzbel.

Átropos: la mayor de las tres Parcas (o Moiras) griegas, hijas de Zeus y Temis, las cuales regían el destino de los mortales. Átropos se encargaba de cortar el hilo de la vida.

Avang Dhu: su nombre significa ‘castor negro’. Es un demonio celta, destructor de la obra del demiurgo (Poder creador universal), representado en la forma de un dragón.

Azael: demonio atractivo y seductor, que enseñó a las mujeres el arte de maquillarse y la cosmética en general. Fue uno de los ángeles que se rebelaron contra Dios, bajo el mando de Azazel y Samyaza. Se dice que está encadenado sobre piedras puntiagudas en un lugar oscuro del desierto, esperando el Juicio Final.

Azaradel: uno de los demonios bajo el mando de Samael, Azazel y Samyaza, que ilustró a los seres humanos sobre el conocimiento de la Luna y su influencia sobre la Creación.

Azazel (‘cabra de emisario’ o ‘chivo expiatorio’): entidad demoníaca de la mitología hebrea.

Azebel: demonio de segundo orden de la mitología hebrea.

Azhi Dahaka, también llamado Azi Dahaka, Azi Dahak, Dahaka y Dahak: figura demoníaca de la Persia zoroástrica.

Azlat: demonio de la mitología hebrea.

Azrael, también conocido como Ezrael, Izra'il, Izrafil, Abu-Jahia y Abou-Jaria: en el islamismo, el Ángel de la Muerte; demonio musulmán cuya categoría es de Arcángel. Fue el lugarteniente de Lucifer durante la rebelión; está cubierto con un millón de velos, es más grande que los cielos, y el mundo se encuentra en sus manos como un plato, del que puede comer cuanto quiere. Tiene cuatro caras: una adelante, otra arriba de la cabeza, otra detrás, y la última debajo de los pies, posee cuatro alas y su cuerpo está cubierto de innumerables ojos: cada vez que cierra uno, muere un ser humano.